Contra el impeachment! Contra el gobierno Dilma y su ‘ajuste fiscal’!
Declaración sobre Brasil:
Contra el impeachment! Contra el gobierno Dilma y su ‘ajuste fiscal’!
Abril de 2016
La siguiente declaración fue originalmente publicada en portugués el 11 de abril de 2016, como una versión reducida de un artículo más amplio posteado el 23 de marzo (en portugués: https://rr4i.milharal.org/2016/03/24/desafios_da_atual_conjuntura/). Este fue escrito ANTES de que la Presidente Dilma Rousseff (PT) fuera removida de su cargo el 12 de mayo del mismo año.
Dilma merece ser juzgada por sus crímenes contra la clase trabajadora, como los cortes de derechos sociales, la complicidad con la represión a los movimientos sociales, la entrega de las riquezas del país al imperialismo internacional etc. El mismo vale para el ex-presidente Lula. Mas sólo quien puede hacer eso es la clase trabajadora con su lucha para barrer y revertir las medidas del gobierno y enfrentarlo. El actual impeachment es una maniobra de la oposición PSDB/DEM y de sectores del PMDB que quieren asumir ellos mismos el poder ejecutivo. Esos señores quieren aprovecharse de la crisis del PT y de Dilma para su propio beneficio. Una caída de Dilma de esa manera no beneficia a los trabajadores y, la verdad, no mudaría la onda de ataques, pero al contrario, la intensificaría. Nosotros los del Reagrupamiento Revolucionario nos oponemos al golpe que es el impeachment, no por ser a favor al gobierno del PT, mas sí por reconocer ese proceso de impeachment como una farsa de la oposición de derecha para aprovechar de la insatisfacción de la población, angustiada y cansada de los ataques que vienen sufriendo por parte de la burguesía y del gobierno. Pero lo que quieren los defensores del impeachment es profundizar tales ataques y arbitrariedades.
Por un frente unido de lucha de los trabajadores!
El elemento esencial para que la clase trabajadora enfrente la actual coyuntura con éxito es la formación de un polo independiente tanto de la oposición de derecha como del gobierno, que unifique las varias luchas de los trabajadores que ya están aconteciendo en torno de las siguientes medidas: Contra los ataques del gobierno Dilma y su ‘ajuste fiscal’! Ningún corte de verbas de los servicios públicos, retirada de derechos del trabajador o despidos en masa! Contra la criminalización de los movimientos sociales de la ‘Ley antiterrorismo’! Que los patrones paguen por la crisis! Contra la oposición de derecha y su maniobra de impeachment! Esa debe ser un frente que unifique las luchas, basada en esas posiciones fundamentales para los trabajadores en el actual momento. Al mismo tiempo, debe permitir a todos los individuos, grupos y partidos de la clase trabajadora que quieran participar una amplia libertad de debate y crítica entre sí.
Basta de bloques de colaboración con los lulistas / dilmistas
Muchos grupos en la izquierda, incluyendo la mayoría de las tendencias internas del PSOL (Partido Socialismo y Libertad), tales como la “Insurgencia” (sección del Secretariado Unificado) y la sección brasilera del CWI (LSR), así como el partido stalinista PCR, están participando de bloques políticos dominados por fuerzas pro-gobierno, como el “Frente Pueblo sin Miedo”. Mientras se dicen ‘Por la Democracia’ y contra el impeachment, esos bloques incluyen el PT y el PCdoB y los líderes burocráticos de la CUT, CTB y UNE (las centrales sindicales y organización estudiantil nacional que son fieles apoyadores de Dilma). Ellos son un obstáculo para la formación de un efectivo frente de luchas contra las “medidas de austeridad” del gobierno Dilma y del restante de la burguesía. En varias ocasiones el Frente Pueblo sin Miedo deja de lado sus críticas al gobierno y se adapta al discurso de los sectores lulistas / dilmistas, como el “Frente Brasil Popular” controlada por el PT. Todo lo que los trabajadores no precisan en este momento crucial es estar remolcados por los pro-gobierno. Llamamos a todos los compañeros honestos de la base militante de estas organizaciones de masa a romper con esos bloques de colaboración de clases y luchar por la formación de una unidad de luchas que se oponga a todos los sectores de la burguesía que atacan a los trabajadores.
El error del slogan de “Que se vaya Dilma, que se vayan todos!”
Idealmente, somos a favor de un “Que se vayan todos!” en el sentido de que queremos sacar del poder a todos los representantes de la burguesía. Pero, defender esa demanda en el actual momento, en que la única posibilidad concreta es que un ‘Que se vaya Dilma’ lleve a un gobierno de derecha del PMDB-PSDB, no es abogar la causa de los trabajadores, mas ser indiferente en cuanto a los resultados de la concretización de esa demanda. Eso sería diferente si la amenaza concerniente sobre Dilma fuese la del movimiento de la clase trabajadora, es claro. El llamado por un ‘Que se vaya Dilma, que se vayan todos!’ defendido por el partido morenista PSTU (LIT-CI), por la también morenista CST (tendencia interna del PSOL y sección brasilera de la UIT-CI) y algunos grupos anarquistas, no asume la perspectiva de derrotar el gobierno Dilma y sus políticas por las manos de los trabajadores, pero sí a su retirada o salida del poder sin que el movimiento de la clase trabajadora esté listo, en éste momento, para beneficiarse de eso – y cuando sólo la oposición de derecha puede hacer eso. Tal posición parte de la falsa lógica de que la caída de Dilma, no importa como ocurra, daría lugar a un gobierno ‘más débil’, lo que constituiría un tipo de ‘victoria’ para los trabajadores. No queremos auxiliar la vieja derecha, que está cada vez más fuerte, en este intento de crear un gobierno que va a atacarnos todavía más duramente. Reafirmamos que sólo la formación de un polo proletario independiente tanto de la oposición de derecha cuanto del gobierno Dilma ofrece una perspectiva de derrota para estos verdugos.
Nada de “elecciones generales”: Lo que necesitamos es de un gobierno revolucionario de los trabajadores!
Rechazamos la propuesta por nuevas “elecciones generales” que ha sido defendida por corrientes de la izquierda, como el MES (tendencia interna del PSOL y la sección de la corriente “Movimiento”) y también el PSTU (LIT-CI). Para los intereses de los trabajadores, las elecciones burguesas son un callejón sin salida. La burguesía sólo financia extensivamente las campañas dispuestas a defender sus intereses de clase. Además, los trabajadores no pueden decidir en las elecciones sobre los temas que realmente afectan a su vida: cómo su lugar de trabajo será gestionado, quién va a pagar por la crisis económica, o sobre las leyes de la reducción de sus derechos, por ejemplo. Las elecciones no son más que una “oportunidad” que la gente tiene que elegir sus verdugos. Se puede participar en las elecciones, en los momentos de calma, para denunciar el capitalismo. Pero de ninguna manera es aceptable que dichos “revolucionarios” presenten la propuesta de un nuevo proceso electoral en este momento, cuando lo que se necesita es una lucha sin descanso contra los ataques del gobierno y la derecha. A veces, los autores de esta propuesta dicen que estas elecciones serían diferentes, “controladas por los trabajadores”, pero eso no cambia su confusión. Si los trabajadores tienen poder para hacer “elecciones” de este tipo, contra la clase dominante, bien podrían construir su propio gobierno revolucionario. Tiene la misma inconsistencia la posición del MRT (Fracción Trotskista y cadena de noticias La Izquierda Diario) por una “Asamblea Constituyente convocada por los trabajadores”. La reivindicación que debemos hacer los en este momento es de un gobierno revolucionario de trabajadores que pueda satisfacer nuestros intereses sociales y democráticos. A pesar de que no es posible su inmediata realización, los revolucionarios deben explicar pacientemente su necesidad, mientras luchan por la construcción de un amplio frente unido de lucha.
Nosotros los del Reagrupamiento Revolucionario luchamos por la construcción de un partido revolucionario de los trabajadores, que se posiciona en la defensa de las siguientes reivindicaciones:
– Ningún corte a más puestos de trabajo! Debemos exigir la disminución de las horas de trabajo sin disminución de salario, permitiendo la reintegración de despedidos y la contratación de los desempleados. Son los patrones que tanto lucraron en los últimos años que tienen que pagar por la crisis de su sistema.
– Queremos también la abertura de los archivos de contabilidad de los grandes bancos y empresas para revelar la fortuna que los grandes capitalistas y banqueros continúan haciendo a costa del sudor de los trabajadores, en cuanto el costo de la crisis sólo es arrojado en nosotros.
– Para frenar los efectos de la inflación creciente que sentimos en nuestras mesas, exigimos reajustes automáticos de los salarios de acuerdo con el aumento de los precios y también un salario-mínimo que atienda a las necesidades básicas de la familia trabajadora, hoy calculado en R$ 3.725.
– Contra el Proyecto de Ley de la tercerización! Que los trabajadores tercerizados sean todos integrados a las empresas para las cuales prestan servicios con plenos derechos e igualdad salarial. Para combatir el machismo y el racismo, queremos pagos iguales por salario igual.
– Contra la contrarreforma de la Previdencia Social, propuesta por Dilma para aumentar el tiempo de trabajo y reducir el valor de las jubilaciones!
– Contra más subastas del petróleo y la deteriorización de Petrobras! Debemos exigir la nacionalización plena da Petrobras y la expropiación, sin indemnización, de las compañas petrolíferas extranjeras, bajo el control de los trabajadores!
– Abajo la ‘Ley antiterrorismo’, hecha para ser usada contra los movimientos sociales! Por la disolución de la policía militar y otras fuerzas policiales de represión a los movimientos de los trabajadores! Defender el derecho de manifestación, un derecho democrático cada vez más prohibido por los gobiernos. Exigimos la caída de todos los procesos contra los luchadores de las causas populares que combaten las injusticias del capitalismo.
– Abajo la interferencia de la Bancada Evangélica del Congreso y de las Iglesias en los derechos de las mujeres. Legalización del aborto y garantía de procedimiento seguro y gratuito por el Sistema de salud público!
– Abajo las arbitrariedades del Juez Sergio Moro y del Poder Judicial! Derecho de la población a que elija sus jueces y demás cargos públicos de responsabilidad! Basta de administración para la corrupta casta política: que todo parlamentario electo reciba apenas el salario medio de un trabajador!
– Derecho a la tierra para quien en ella quiera vivir y trabajar! Expropiación de las tierras e inmuebles de los grandes especuladores capitalistas para beneficio de la población!